El docu trata sobre el genocidio en Indonesia en 1965. Se calcula que más o menos 2.5 millones de personas fueron asesinadas. La mayoría supuestamente comunistas, que eran el objetivo de la masacre. Grupos paramilitares se encargaron de ejecutar asesinatos en masa, desarrollando técnicas para hacerlo eficientemente. Lo bizarro del asunto es que hasta ahora, en 2013, mucho de los que cometieron los asesinatos están en el poder, cuentan pormenores de sus crímenes con orgullo y no está muy claro, al menos en el documental, cómo son percibidos por la sociedad.
El trabajo de Oppenheimer consistió en convencer a los asesinos de narrar en detalle sus crímenes para una película. Ellos aceptaron y fungieron como actores en el documental. Como están orgullosos de sus crímenes parece que aceptaron sin problemas. De hecho lo curioso del docu es que los actores, es decir, los verdaderos asesinos, se meten totalmente en el desarrollo de la película, muestran mucho interés en el resultado, en la actuación, en que sea creíble, se toman realmente en serio su trabajo y también se preguntan cómo serán juzgados por la sociedad.
Cuentan sobre los métodos para asesinar sin derramar tanta sangre y con rapidez. Es interesante ver como el método los distancia del acto. Por ejemplo, esto sucede cuanto cuentan como ahorcaban con alambres a sus víctimas. Esto es algo que también sucedió con los nazis en Alemania. Concentrándose en el método se olvidan un poco que estan acabando con vidas humanas. Pero a pesar que no discuten el tema humano en un plano consciente, sus cuerpos si reaccionan. Uno de los asesinos cuando va al centro de ejecución comienza a convulsionar. Convulsiona y parece que va a vomitar pero luego prosigue contando su historia, como si no se percatace de la reacción de su cuerpo.
Hay escenas que son realmente duras. Una de las más fuertes es cuando uno de los asesinos explica con un muñeco de peluche como asesinaba a un bebé, primero le clavava un fierro en el ojo, luego le cortaba las piernas, todo mientras le iba comentando a la madre lo que hacia con su bebé y le decía que ella tenía la culpa de lo que le estaba pasando a su bebé. Uno no puede evitar llevar esa actuación a la realidad. Pero también hay escenas raras. En un momento invitan a los asesinos/actores a un programa de televisión. Allí son tratados como héroes. Pero detrás de cámara la gente comenta otras cosas, dicen que estan totalmente trastornados.
Conozco casi nada de la realidad Indonesia, pero me intriga saber realmente qué piensa la sociedad de esta gente. Lo raro es que los paramilitares que cometieron todos estos asesinatos siguen en el gobierno. En el docu se muestra como el vice presidente los va a visitar, les da una charla, y los elogia. También se ve como luego algunos de estos paramilitares van por el mercado chantajeando a gente, pidiéndoles dinero para distintas causas, muy estilo a la mafia. Por cierto, a los paramilitares en Indonesia les llaman gangsters, pero ellos dicen que la palabra gangster viene de ser libre y que siendo así les queda bien.
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